WEC

Toyota gana el título de constructores del WEC y Alonso acaricia el título

Toyota Gazoo Racing se alzó con el título de constructores del Campeonato Mundial de Resistencia (WEC) de la FIA 2018-2019 en las 6 Horas de Spa-Francorchamps tras el triunfo del TSO50 Hybrid nº 8 de Fernando Alonso, Sébastien Buemi y Kazuki Nakajima y la sexta plaza del TSO50 Hybrid nº 7 de Mike Conway, Kamui Kobayashi y José María ‘Pechito’ López.

La cuarta victoria de la Supertemporada del WEC de Fernando Alonso y sus compañeros Sébastien Buemi y Kazuki Nakajima, después de los triunfos de Spa 2018, Le Mans 2018 y Sebring 2019, acercan al piloto asturiano a un nuevo título mundial, en este caso el de pilotos del WEC. Se resolverá a mediados de junio en las 24 Horas de Le Mans2019 con una clasificación encabezada por Alonso, Buemi y Nakajima con 160 puntos, por los 129 Conway, Kobayashi y ‘Pechito’ López.

Con 39 puntos en juego, los 38 de la carrera y el punto extra por lograr la pole position, el piloto asturiano de Toyota junto a sus compañeros en el nº8 únicamente no serán campeones si terminan más allá de la séptima plaza y ganan Conway, Kobayashi y ‘Pechito’ López las 24 Horas de LeMans.

El título logrado por Toyota Gazoo Racing en Spa es el segundo de constructores del WEC que logra Toyota desde que en 2012 regresó a la máxima categoría de la resistencia ya que Toyota se alzó con el triunfo en 2014.

UNAS 6 HORAS DE SPA-FRANCORCHAMPS MARCADAS POR LA CLIMATOLOGÍA

El Circuito de Spa-Francorchamps amanecía nevado, presagio de las complicadas condiciones meteorológicas que se iban a suceder durante prácticamente toda la carrera. Aunque el arranque de la prueba, con Mike Conway en el nº 7 y Sébastien Buemi en el nº 8, fue en seco y con sol, la lluvia hizo acto de presencia a los 5 minutos.

Los dos prototipos de Toyota entraron a boxes en la vuelta 3 para montar neumáticos de agua, perdiendo las dos primeras posiciones temporalmente, ganadas en la clasificación del día anterior y tardando un poco más en regresar a pista el nº 8.

Poco antes de la primera media hora la situación se complicó cuando comenzó a nevar y el Safety Car hizo que se agrupan todos los coches. Antes de la primera hora de carrera, una vez se marchó el Safety Car, los dos Toyota volvieron a situarse primero y segundo. A los pocos minutos intercambiaron las posiciones cuando Sébastien Buemi culminó una remontada que había empezado antes del Safety Car y la nevada al aprovechar un error de Mike Conway.

Poco a poco los dos prototipos de Toyota fueron incrementando su ventaja. Un nuevo Safety Car, por piezas en pista tras un incidente, hace que se vieran en pista dos estrategias diferentes: el nº 8 paró antes, perdiendo momentáneamente el liderato, igual que unos minutos después al tener que volver a entrar a boxes para montar neumáticos de seco. El hueco en ese momento entre ambos Toyota era de más 30 segundos. Poco a poco el nº 7 fue ampliando su ventaja, llegando a más de un minuto en torno a la segunda hora de carrera.

Cuando restaban 4 horas para el final de la prueba ambos prototipos de Toyota realizan el primer cambio de pilotos, entrando Alonso en el nº 8 y Kobayashi en el nº 7. El piloto asturiano comenzó a marcar buenos tiempos, llegando a reducir la desventaja a 45 segundos. Sin embargo, un trompo le obligó de nuevo a sacar lo mejor de sí mismos para reducir un hueco que llegó a superar los dos minutos. Y lo logró dejando la diferencia de nuevo en torno a 45 segundos cuando se estaba alcanzando el ecuador de la carrera.

En ese momento, cuando restaban tres horas para finalizar las 6 Horas de Spa-Francorchamps 2019 llegó el momento clave de la prueba: problemas en un sensor del sistema híbrido del nº 7 cuando se encontraba en los boxes le hizo perder 11 minutos, el liderato y muchos puestos en la clasificación. El gran trabajo de los ingenieros y mecánicos de Toyota permitió al nº 7 volver a pista.

A poco más de dos horas y media del final, y con Nakajima ya en lugar de Alonso al volante del nº 8, había 4 vueltas entre los dos prototipos Toyota. De nuevo volvió a hacer acto de presencia la lluvia, primero, y la nieve y el granizo posteriormente. A dos horas del final de la prueba, el nº 8 mantenía claramente la primera plaza, con una vuelta de ventaja sobre el segundo clasificado. Por su parte, el nº 7 con ‘Pechito’ López al volante reduce la diferencia vuelta a vuelta, logrando entrar ya en los puntos.

A una hora y 45 minutos de la conclusión regresó Fernando Alonso pero, de nuevo, un Safety Car y una fuerte granizada le complicó la labor al asturiano. No sería el último da que otro fuerte aguacero hizo que fuese necesaria su presencia cuando restaban 40 minutos para el final de la carrera.

Poco antes, el nº 8 entraba en boxes para repostar y cambiar neumáticos, manteniéndose Fernando Alonso al volante, de forma que el piloto asturiano sería el que protagonizara el último relevo. Por su parte, el nº 7 se mantenía sexto, con el último cambio de piloto realizado al dejar su asiento ‘Pechito’ López a Kamui Kobayashi.

A 15 minutos del final se marchó el Safety Car pero cinco minutos después terminó la carrera anticipadamente por la todavía peor climatología prevista. Así, el nº8 sumó su cuarta victoria, con el nº7 sexto a cuatro vueltas. Y Fernando Alonso, junto a sus compañeros Buemi y Kobayashi, acaricia ya el Mundial de Pilotos del WEC.