sábado. 18.05.2024

Se acerca la Navidad y, con ella, los viajes para visitar a la familia y a los amigos tras meses de trabajo. Estas fechas, debido al incremento de traslados en carretera, son unas de las más señaladas en las campañas de seguridad vial y es que en 2020, entre las tres de la tarde del 20 de diciembre y las doce de la noche del seis de enero, la Dirección General de Tráfico (DGT) registró hasta 57 fallecidos y 52 accidentes en carretera a nivel nacional.

Por ello, desde AECA-ITV recuerdan la importancia no solo de comprobar la vigencia de la ITV, sino también de preparar el vehículo antes de comenzar un viaje, sobre todo en el caso de aquellos conductores cuyos planes sean realizar una visita a la nieve.

Comprobar el estado de la batería

En invierno hace más esfuerzo, ya que las bajas temperaturas pueden reducir su capacidad. Además, la calefacción de la luna trasera y los asientos, el sistema de iluminación y el ventilador funcionan a menudo de forma simultánea y al más alto nivel. Por ello, la comprobación del estado de la batería antes de que llegue el invierno es muy importante. Lo más recomendable es acudir a un taller de confianza, donde el mecánico averiguará rápidamente si es necesario reemplazar una batería debilitada o bien cargarla.

Revisar los neumáticos

El primer paso antes de emprender nuestro viaje debe ser revisar el estado de los neumáticos y comprobar que la presión de inflado sea la que indique el fabricante y que la profundidad del dibujo sea siempre superior a 1,6 mm. Si tiene menos, debes cambiar los neumáticos.

Además, en el caso de que nuestro viaje sea a zonas con nieve o a lugares con un mayor riesgo de precipitaciones, los especialistas recomiendan sustituirlos por neumáticos de todo tiempo (all season) o por neumáticos de invierno.

Este modelo destaca por su eficiencia en temperaturas inferiores a 7ºC; gracias, por un lado, al material que impide que la goma pierda sus propiedades y se endurezca en condiciones de baja temperatura y, por otro lado, debido al diseño de la banda de rodadura, cuyo dibujo más recortado y profundo les permite ofrecer una capacidad de tracción más eficiente, una mayor adherencia y un mejor frenado.

En caso de no disponer de neumáticos de invierno, se deben llevar cadenas y utilizarlas sólo cuando el pavimento esté nevado, teniendo en cuenta que será necesario colocarlas en el eje motriz del vehículo, al menos en una rueda de cada lado (en caso de ejes gemelados) y en ningún momento se recomienda superar una velocidad de 40 km/h puesto que se podrían romper o deteriorar el neumático.

Se recomienda practicar cómo se colocan las cadenas antes de que sea necesario su uso, ya que con los dedos fríos y la nueve es mucho más complicado y podríamos bloquear la calzada.

Comprobar el líquido anticongelante y otros

El anticongelante del circuito de refrigeración es vital para poder arrancar a bajas temperaturas. Este líquido debe cambiarse como máximo cada dos años para que no pierda su eficacia, tanto en invierno como en verano.

También es recomendable comprobar las especificaciones del aceite lubricante de tu vehículo para evitar que se congele.

Es altamente recomendable llevar el depósito de combustible lleno por la posibilidad de quedarse bloqueado o la necesidad de parar cuando se circula por zonas de nieve, hielo o niebla.

Revisar los parabrisas y limpiaparabrisas

Los limpiaparabrisas resultan un elemento indispensable, sobre todo con la llegada de los meses fríos, y es que según los últimos estudios realizados su mal estado puede llegar a suponer una pérdida de visibilidad de entre el 20 y el 30%.

Para garantizar que funcionen correctamente es importante llevar a cabo varias comprobaciones con tiempo suficiente para poder sustituirlos en caso de que presenten algún daño. Para ello debemos fijarnos en si, al accionarlo, nuestro limpiaparabrisas emite algún sonido aunque el cristal se encuentre seco, o si al poner las escobillas en funcionamiento dejan el cristal emborronado, con zonas sin limpiar o con rastros de agua sobre la superficie limpia.

Equipamiento en caso de avería

Además de comprobar el estado de los componentes del vehículo, los profesionales recomiendan viajar equipados para prevenir cualquier problema que pueda producirse en caso de quedar detenidos a causa de la nieve.

Algunos de los elementos más recomendados son: un chaleco de alta visibilidad y un triángulo de emergencia o la señal luminosa V16, dos artículos que siempre deberían acompañarnos; ropa de abrigo y una manta para mantenernos abrigados en caso de que el vehículo se quede sin batería; linterna; un anticongelante para proteger al motor de altas y bajas temperaturas, para que siempre se mantenga en la franja ideal; un raspador para el hielo y un limpiador de parabrisas de repuesto, por si el nuestro se congelara y llegara a romperse.

Finalmente, entre las recomendaciones se encuentran tener el móvil siempre con suficiente batería y llevar un cargador para coche, contar con un mapa de carreteras para poder orientarnos en caso de estar incomunicados, vestir calzado cómodo y antideslizante, llevar alimentos no perecederos, agua y botiquín de primeros auxilios.

 

Cinco recomendaciones para preparar un vehículo antes del invierno